INTERNACIONAL

El Bikini y la era nuclear

El Bikini y la era nuclear

Foto Copyright: pinterest.com

Bikini fue como tradujeron Pikini los colonizadores alemanes. El nombre se lo habían dado los locales a su pequeño y paradisiaco atolón a la mitad del océano pacífico cuando habían llegado en pequeñas canoas hace más de cuatro mil años. Significa tierra rica en cocos. Hoy el archipiélago de 23 islas forma parte de la Republica de Islas Marshall y es considerado como patrimonio de la humanidad por la UNESCO. Pero del final de segunda guerra mundial hasta 1979 este archipiélago fue una posesión norteamericana y durante este periodo la laguna central de Bikini fue utilizada como sitio para la operación Castle: en total se probaron más de 20 bombas nucleares y de Hidrogeno, lo que equivaldría a unas 4,380 bombas como la que detonó Estados Unidos en Hiroshima. Hoy Bikini sigue siendo inhabitable. Es un paraíso que sólo se puede ver desde lejos y en fotografías. Más contaminado que Chernóbil y en contacto permanente con las aguas del océano más grande del mundo.

En marzo de 1946, 5 días después del Bravo test, la explosión más grande que se llevó a cabo durante toda la operación, el ingeniero mecánico francés Louis Reard lanzó, en la piscina del hotel Melitor de Paris, el Bikini como una prenda de ropa revolucionaria para conmemorar el gran logro técnico que el evento representaba para el desarrollo de la humanidad, se inauguraba el periodo de la paz perpetua y el bikini sería su profeta.

Fue una explosión cultural tan grande como la Bomba H, pronto la maquinaria de relaciones públicas había logrado resignificar la palabra y asociarla, no a la devastadora catástrofe ambiental ni a la crisis humanitaria que había representado la creación de estas armas sino, a la supuesta liberación cultural que ofrecía la Pax Americana. Desublimación represiva la llamaría Herbert Marcuse.

En 1972 el presidente Lyndon b Johnson dio la orden para que los nativos regresaran a Bikini. Se les dijo que los niveles de radiación ya habían bajado y que era seguro para vivir, 16 años más tarde, cuando los locales le ganaron una demanda Unidos por daños y perjuicios al gobierno de Estados, quedó probado que esto era falso. En realidad los nativos fueron regresados a sus islas para que la agencia de energía atómica norteamericana pudiera estudiar los efectos de la radioactividad en los seres humanos. Fueron conejillos de indias para los americanos, entre ellos por iban mujeres y niños pequeños. La Agencia de Energía Atómica de Norteamérica sabía muy bien que Bikini era el lugar más radioactivo en todo el mundo, sus documentos lo prueban. En 1986 Washington perdió el juicio y se vio obligado a pagar 75 millones de dólares en indemnización para las víctimas y 90 millones para descontaminar el atolón.

Esta es sólo una pequeña parte de la historia de Washington con las armas nucleares. Hoy Estados Unidos acusa a Irán de ser un peligro precisamente porque tiene anhelos nucleares y no podemos más que preguntarnos ¿con qué autoridad moral?


#LFMopinion
#Bikini
#EraNuclear
#Iran
#Washington

Luis Rodrigo Farias

Luis Rodrigo Farias

Sigueme en: