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Más entuertos que enmendar

Más entuertos que enmendar

Foto Copyright: lfmopinion.com

Mexicana de Aviación

Mexicana de Aviación fue declarada en quiebra en abril de 2014. Antes, en 2010 dejó de volar y hoy, en agosto de 2018 los pilotos, sobrecargos y demás trabajadores han empezado a cobrar la llamada segunda dispersión de quién sabe cuántas, al través de un banco de caricatura como es Bansefi, cuyo titular es quien exoneró el asuntito de la Casa Blanca y que pasará a la historia como una variable parteaguas de la derrota pripanista del 53%. En efecto, algunos han empezado a cobrar una segunda parte mínima del sueldo devengado ya trabajado desde aquel 2010 con descuentos y sin liquidación. Otros lo intentan infructuosamente por la burocracia bancaria que pone más obstáculos que atención al cliente. Que falta un nombre, que el apellido no está bien escrito. Que tienen que regresar antes de la una de la tarde y otras trabas kafkianas del México que ya no debiera de existir y muchos esperamos que acabe con la nueva Administración del presidente electo, que ha prometido luchar en serio contra la corrupción.

Mientras tanto, el exdueño de la empresa, Gastón Azcarraga, vive como magnate en Nueva York, amparado y a pesar de documentadas acusaciones de fraude y con órdenes de aprehensión en su contra.

Mexicana de Aviación se fundó en 1921 con capital extranjero y con una primera ruta Ciudad de México-Tuxpan-Tampico. En 1960 se hizo totalmente mexicana. En la década de los setenta fue conocida como la aerolínea milagrosa por sus extraordinarios resultados, en los ochenta fue nacionalizada por el gobierno federal y en diciembre de 2005 propiamente se regaló al Grupo Posadas como pago de gastos en campaña panista. Se vendió malbaratada por 165 millones de dólares.

Años de bonanza se cambiaron por decisiones vergonzosas y sólo rentables en favor del grupo hotelero capitalizado en contra de los intereses de la aviación, todo el teatro se formuló desde antes cuando los nuevos dueños hoteleros empiezan a vender edificios, instalaciones diversas, servicios, culpándose a los trabajadores y sindicatos de la debacle.

El gobierno panista que había declarado que por ningún motivo se quebraría a Mexicana, en impúdica asociación y contubernio con Gastón Azcarraga y socios, promovió su desaparición.

Hoy en día, muchos expilotos de Mexicana trabajan alrededor del mundo, muchos sobrecargos y demás trabajadores se han reinventado para sobrevivir, algunos se suicidaron, otros enfermaron, se rompieron familias y apenas la ley ha ordenado el mínimo pago devengado hace 8 años, y que Bansefi obstaculiza cobrar. Ciertamente se acumula el trabajo para Morena, más entuertos que corregir a partir del 1º de diciembre.


Ojalá los panistas, los beneficiarios de la quiebra y demás cínicos paguen las deudas que la sociedad tiene con los trabajadores de Mexicana de Aviación que han sido testigos de cómo la ley se aplicó siempre en su contra, cuando abusivamente se les dio la espalda.

Como en otros casos de robo e impudicia, cabe subrayar que los sinvergüenzas no deben prevalecer más en la esperada Cuarta Transformación del país. No todo se podrá lograr pero algunos entuertos como esté deberán de corregirse por el justo bienestar de todos, para aplaudir la conformación de un país con ética y justicia.

Recordemos: "No Man Is An Island Intire Of It’ Self; every man is a piece of the Continent a part of the Main" (J. Donne).



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Arturo Martinez Caceres

Arturo Martinez Caceres

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