PROHIBIDO PROHIBIR

Irlanda o el destino

Irlanda o el destino

Foto Copyright: lfmopinion.com

Muchas veces se discuten puras tarugadas

La felicidad es volar sobre el Atlántico en un 767 a 11 mil metros de altura y 850 km/h, con una copa de vino de Burdeos en la mesita de viaje, oír el adagio del Nuevo Mundo en los audífony y saber a mi hija en los controles de vuelo.

Me propongo disfrutar en tiempos de dolor por una sentida perdida, se que haré lo que tengo que hacer en la verde Eire y dedicaré un tiempo para mí. Me propongo no seguir nada de noticias ni periódicos mexicanos. Sin embargo, la tentación me toca y es más fuerte que mis deseos de abstención.

La discusión sigue igual: que el país no está en bancarrota. Yo veo de lejos que tampoco está en Jauja y que las ansias críticas se exacerban en espera del inevitable 1 de diciembre y las metidas de pata de la nueva administración. Pareciera que es inadmisible creer en la posibilidad real de construir un nuevo régimen sin corrupción, sin pobreza, sin violencia, sin deuda billonaria en dólares, sin medios de comunicación que viven del chayote oficial y periodistas o pseudo periodistas como Alemán, Hiriart, el tal Hugo, Loret y el Ticher, por ejemplo, a quienes les desagrada hasta las gónodas, de haberlas, todo lo que diga o calle el Presidente Electo. Por fortuna, a veces aparece Lorenzo Meyer y les da una ligera revolcada de antología.

Desde estas alturas todo se ve tan chiquito que veo que muchas veces se discuten puras tarugadas, se gasta el tiempo en infiernitos ¿por qué no esperar a que tome posesión? ¿Por qué no darle un tiempo razonable para enjuiciarlo? Se ve de lejos que los mexicanos tenemos la genética de la derrota preanunciada en la sangre, en cambio otros pueblos se fortalecen en la crisis aún a costa del famoso "sangre, sudor y lágrimas". De lejos veo la sardónica sonrisa de los poderosos echando andar la maquinaria que aplaude la derrota anticipada; sobándose de gusto las manos y practicando el "se los dije": este pueblo tiene culturalmente la corrupción acendrada en las venas y hay que gobernarlo a gasolinazos y robos, secuestros y muerte, al fin todo aguanta, mientras siga consumiendo y pagando impuestos, la estabilidad se impondrá y arriba estará la tasa de ganancia, como sucede en el sector bancario, por decir algo desde más lejos.

Y no es que desdeñe la crítica, me cae regordo esa payasada de la constitución moral más propia de homilía dominical que de un país de libertad. Tampoco es aceptable aunque políticamente entendible para no hacer olas ahora, eso de que no se castigará a quienes han cometido delitos contra el interés nacional y son ejemplares promotores del fraude y el enriquecimiento ilícito. Creo que se debe de combatir la criminalidad con fuerza y con Derecho, en todo tiempo, aún en el sexenio del amor y la paz.


Desde los acantilados, gaélicos vieron llegar a los vikingos y a los normandos y a los ingleses y, con beneplácito, a los estadounidenses. Tal vez una absurda persistencia tiene aún dividida la isla y el recuerdo de batallas y bombazos, entre hermanos.

Su economía prevé sufrir ante el Brexit. El turismo, la construcción, el régimen de propiedad y nuevas inversiones y la agroganaderia lo resentirán. Quedan los estudiantes, en la Universidad de Limerick, por ejemplo, se quejan de ellos por ruidosos, fiesteros y poco convencionales, sin embargo cuando se van de vacaciones al segundo día ya los extrañan porque son quienes dan calor y euros a la sociedad de viejos. Y son quienes critican, discuten, estudian y proponen.

Muchos jóvenes, sin embargo, quieren emigrar al resto de Europa y principalmente a los EUA, persiguiendo el sueño del trabajo bien remunerado. Hoy empiezan a añorar la expansión y oportunidades de principios del nuevo siglo, con el auge del mercado común y algunos temen un futuro más incierto.

Como en México la pobreza persiste y se cubre de verde, que es el color nacional, no de rojo. Vi vacas con un tenue color verdoso que hacia fines del otoño abrigan contra el frío y la nieve en graneros y sólidos cobertizos de piedra. En cambio, nuestras autoridades policíacas, descubren fosas comunes anónimas un mes sí y otro también.

Irlanda es sobretodo sus duendes y leyendas, su gente que nunca agacha la cabeza y sigue enfrentando los problemas de vecindad y bienestar con tanta entereza como desde el primer día. El litro de gasolina cuesta ya 1.45 euros, más o menos 1.90 US dólar o 36 pesos mexicanos. Todos saben que cuando se hartan y las cosas no mejoran, cambian democráticamente al Primer Ministro, a su gabinete y al parlamento.



#LFMOpnion
#Irlanda
#Vuelo
#Cambio
#Brexit
#PresidenteElecto

Arturo Martinez Caceres

Arturo Martinez Caceres

Sigueme en: