Inicia la propaganda

Es difícil concebir a las campañas políticas sin la propaganda. De hecho, podríamos afirmar que sin ellas no tendrían mucho sentido.

Los candidatos quieren dejar una información muy especifica en la mente de las personas y suele haber una intención detrás, al difundir ciertas ideas o imágenes. Esa intención es la que debemos de descubrir para saber lo que realmente quieren dejar en tu pensamiento.

El poder de una campaña se basa en utilizar todos los recursos y avances de la propaganda para dejar una huella en tu mente y marcar que optes por ellos y no por alguna otra propuesta. Y el verdadero chiste es que lo hagas sin que te des cuenta de que eres manipulado.

El problema es que la mayoría de las personas no estamos protegidas contra la manipulación de la propaganda y caemos fácilmente en llevarnos a votar por ellos, digamos que casi es una obediencia a ciegas. La propaganda es uno de los instrumentos más eficaces que se han descubierto para someter a las personas y en general al pueblo a la voluntad de los candidatos o, ya en su caso, de los políticos en el poder.

Es un tema en el que interviene la libertad y perderla al estar expuestos a una especie de esclavitud mediática que te impide tomar conciencia de que estás siendo bombardeado por mensajes que te impiden pensar por tí mismo.

Los candidatos estudian las necesidades y las esperanzas de sus electores y por medio de la propaganda van a tratar de cumplir sus deseos o expectativas. Por ello prometen cuanto saben que el pueblo desea o necesita.

Te pueden decir lo que sea, llegar a mentir con falsas promesas y hacerte creer que no son lo que en realidad están ocultando.

Lo mejor que podemos hacer es ponernos en guardia ante tanta demagogia y publicidad y desarrollar un pensamiento más crítico.

Esa es la verdadera meta de una buena educación cívica, saber que la propaganda te va a influir y tratar de manipular, si no eres capaz de defenderte de ella, por medio de un pensamiento crítico. Que sea capaz de analizar y ver las mentiras, las incongruencias, las contradicciones y en fin la hipocresía de muchos candidatos.

Los expertos en usar la propaganda política han descubierto que asociarla a las emocione, la hace más efectiva, por lo que también necesitamos estar atentos a que no nos hagan sentirnos enojados contra alguien (en especial a los de otro partido), o llegar a regalarnos cosas, o hacer fiestas con tal de que asociemos a un partido con las emociones positivas. Pero particularmente no caer en la trampa del miedo o el de una sensación amorosa y feliz.

Así que es tiempo de abrir bien los ojos y que no te roben tu consciencia. La libertad y el pensamiento crítico es tu mayor protección.

Promover el voto es una acción obligatoria en una genuina democracia, pero también lo es vacunar a los electores de la salvaje manipulación de la propaganda y la publicidad que avasallan y corrompen la libertad de los ciudadanos.

Promover el pensamiento crítico, el análisis, la toma de consciencia de todo cuanto está detrás de las ideologías y las propuestas de gobierno, es también una tarea fundamental. Pero más aún es indispensable que tengamos la capacidad de quitarle la piel de corderito a los lobos de la política, de desenmascarar a los hipócritas, a los falsos profetas, a los neuróticos ambiciosos del poder, a los que viven de la codicia y el hambre por el dinero y los privilegios.

A obligarlos a que desnuden sus verdaderas intenciones y que domine la transparencia y no el ocultamieno y los tratos por debajo de la mesa y a espaldas del pueblo.

Ciertamente necesitamos de buenos políticos y líderes de altura, y para ello requerimos quitar la hierva mala que obstruye e impide su crecimiento, tal y como se hace en la siembra del maíz.

México necesita de una limpieza a fondo de la casta política, una verdadera sacudída y filtro que impida que lleguen los peores y que le roben una curul a los mejores.

México tiene mucho talento y grandes líderes, pero la lacra ha impuesto su cerco y bloquea el paso a que circulen a donde deben llegar. Como los delincuentes bloquean una carretera para cometer sus fechorías.

Mejor una propaganda para difundir y promover, que para engañar y manipular. Que eleve la conciencia y no que la oprima y nos quiera lavar el cerebro.

#LFMOpinion
#+Conciencia
#Propaganda
#PensamientoCritico
#Manipulacion
#Politica
#Elecciones