Ya no es tiempo de plantear preguntas: congresistas norteamericanos

No es la primera misiva y, parece, no será la última.

Ayer congresistas de Estados Unidos expresaron en otra carta a las autoridades comerciales de su país su profunda preocupación sobre la escalada de esfuerzos del Gobierno mexicano de excluir del sector energético a las empresas privadas, en abierta contravención de sus compromisos internacionales, por delante el Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (T-MEC).

La lista de acciones discriminatorias, sostienen en su carta, es abrumadora y hace mucho tiempo se rebasó la vertiente de ‘simplemente’ plantear preguntas sobre los compromisos de López Obrador con la letra y el espíritu del T-MEC.

"Ellos en realidad sugieren que el gobierno mexicano está intentando de manera proactiva promulgar políticas y tomar acciones que violan y socavan el Tratado".

Los 40 congresistas dirigen su carta a la representante comercial Katherine Tai; al Secretario de Estado, Anthony J. Blinken; la Secretaria de Comercio, Gina M. Raimondo, y a la Secretaria de Energía, Jennifer M. Granholm.

"Los informes recientes de acciones discriminatorias contra empresas estadounidenses requieren una respuesta oportuna y clara. Nosotros los instamos a que redoble sus esfuerzos para presionar a las autoridades mexicanas para que detengan las acciones discriminatorias y proporcionen a las empresas estadounidenses que operan o comercian con México en igualdad de condiciones, según lo previsto por el T-MEC", indicaron los congresistas.

Señalan con todas sus letras que el propio presidente López Obrador ha reconocido el objetivo explícito de brindar a las empresas nacionales, Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad un trato preferencial, en directa contradicción con el T-MEC, que su propio Administración negoció y firmó.

Para ellos el gobierno mexicano y su partido han defendido la regulación y los esfuerzos legislativos que a todas luces son anticompetitivos y dañinos para el medio ambiente, como los propios tribunales mexicanos lo han determinado.

"Como tales, también son perjudiciales para la inversión estadounidense, los trabajadores estadounidenses y los compromisos con la sostenibilidad, todos los cuales son conceptos protegidos por el T-MEC", concluyen en su carta.

Para ellos alarma que en las últimas semanas se han intensificado acciones discriminatorias y arbitrarias.

"A través de lo que aparece para ser un uso selectivo de la autoridad, han obstaculizado explícitamente —y en algunos casos bloqueado por completo— la participación del sector privado estadounidense en los mercados de combustibles de México".

Al favorecer a Pemex México estaría violando la IMO2020 de la Organización Marítima Internacional y otros compromisos ambientales internacionales, debido al alto contenido de azufre en el combustóleo de Pemex.

En ese mismo sentido, la CFE también ha reconocido su elección de utilizar este mismo combustible sobre gas natural en plantas de energía cerca de las ciudades más grandes del país, como en Tula, Hidalgo, señalaron.

Con información de Reforma.


Publicado en The Búnker.

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