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Las religiones ante posible presencia de seres extraterrestres

Las religiones ante posible presencia de seres extraterrestres

Foto Copyright: lfmopinion.com

Cómo afectaría a las religiones la presencia de seres extraterrestres, tema que la NASA niega investigar, pero que, sin embargo: se mueve.

Al conocer la noticia que la NASA había asignado un presupuesto cercano al millón de dólares para congregar a teólogos y estudiosos de las religiones a indagar cómo podría ser la reacción de las religiones y del ser humano ante la posibilidad de un contacto cercano con seres extraterrestres, y a pesar de las aclaraciones divulgadas sobre el asunto —que a continuación transcribimos de la revista Expansión del pasado 4 de enero— vale bien la pena intentar al final una reflexión.


La NASA no contrató teólogos para analizar reacción de vida extraterrestre

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Un portavoz de la agencia estadounidense reveló que se realizó un programa de 2015 a 2017 pero no con este tema.

La declaración la realizó el reverendo Andrew Davison, teólogo de la Universidad de Cambridge.

Tras la declaración que hizo el reverendo Andrew Davison, teólogo de la Universidad de Cambridge y doctor en bioquímica por la Universidad de Oxford, ambas en el Reino Unido, sobre el reclutamiento de, al menos 24 teólogos por parte de la NASA para estudiar cómo reaccionarían las diferentes religiones del mundo en caso de producirse un contacto con vida extraterrestre, la agencia del gobierno de Estados Unidos lo desmintió.

La declaración la realizó en el blog de la Facultad de Divinidad de la Universidad de Cambridge, Davison en donde afirma que a lo largo de su investigación, hasta el momento, ya ha podido comprobar "`a frecuencia con la que la teología y la astrobiología han sido un tema de los escritos populares` de los últimos 150 años.

Davison, quien es especialista en Santo Tomás de Aquino (fraile, teólogo y filosofo), aseguró que el año próximo publicará un libro titulado 'Astrobiología y doctrina cristiana', en el que cubrirá parte de la exploración espiritual conjunta del CTI y la NASA.

La obra del reverendo relaciona la doctrina cristiana con las ciencias naturales y la filosofía.

Sin embargo, un portavoz de la NASA afirmó a la agencia de noticias The Associated Press, que no han contratado a ningún teólogo para estudiar la posible reacción que los humanos tendrían ante el descubrimiento de vida extraterrestre.

El portavoz explicó a AP que en el año 2015 se proporcionaron fondos al Centro de Investigación Teológica, frecuentemente conocido como CTI, en Princeton, Nueva Jersey, para un programa para estudiar el impacto social potencial de encontrar vida más allá de la Tierra y que esta parte del programa financiada por la NASA terminó en 2017.

El director de CTI, William Storrar, detalló a la AP que el propósito del programa no era asesorar a la NASA, sino convocar a académicos en humanidades para discutir la investigación en astrobiología, el campo científico que estudia el potencial del universo para albergar vida fuera de la Tierra.

“Estas reflexiones académicas sobre las implicaciones sociales de la astrobiología se están publicando en una serie de monografías individuales y artículos de revistas académicas revisados por pares por teólogos, académicos de religión, filósofos y académicos literarios que participaron en nuestro programa de investigación para académicos visitantes en el Centro de Investigación teológica ”, escribió Storrar en un correo electrónico".

Es evidente que el tema es sumamente atractivo e interesante, ya desde hace varios años se ha querido contar con más información sobre los temas de objetos voladores no identificados (ufo), como también sobre la intervención de seres diversos en la historia de las civilizaciones antiguas, el channeling o canalizaciones (recepción de información y conocimientos de seres de otras dimensiones o lugares cósmicos), las multimencionadas abducciones, o incluso encuentros materiales. Pero todo lo anterior suele quedar en el territorio de las especulaciones o hasta en fantasías esotéricas; pero no en las reflexiones de las ciencias y en el interés de las universidades.



Las también recientes revelaciones de Luis Elizondo, ex director de AATIP una área del Pentágono que se dedica al tema de los objetos voladores no identificados

(amenazas aeroespacial).



El video que se dio a conocer sobre una evidencia de una nave extraterrestre, filmada por unos pilotos de la marina norteamericana, ha causado muchas inquietudes, por lo que Luis Elizondo ha estado encargado de las investigaciones y de las revelaciones viables de dichos fenómenos. Principalmente dimitió en 2017 en protesta por la reticencia oficial a hacer públicas las investigaciones. Ahora, bajo su propio riesgo y responsabilidad, se dedica a la divulgación de estos fenómenos.

Todas las últimas revelaciones y la presión del público, desató la petición del Congreso para que los servicios secretos y de inteligencia revelen lo que saben. Estamos en la ansiosa espera de éste informe.

Así que parece que estamos a punto de entrar en una nueva era, en que el tema extraterrestre deje de ser un tema de fantasía cinematográfica y se le tome mucho más en serio.

Luis Elizondo ha mencionado que la tecnología de las naves estudiadas pueden volar a 18 mil kilómetros por hora, hacer giros imposibles para nuestras naves más sofisticadas, que no pasan de 3,500 km por hora y mucho menos volar a 80 mil metros de altura y, en un instante, sumergirse en el mar. Desde luego que es una tecnología muy avanzada.

Desde una perspectiva militar y como una amenaza o peligro para nuestra seguridad, no se ha podido constatar nada, pero no podemos evitar esa posibilidad y conocer sus intenciones y estudiar plenamente este fenómeno, concluye Elizondo

El tema de fondo es la censura oficial, porque hay gente que siente que se le cuestionan sus creencia y convicciones filosóficas y religiosas.

En principio se plantea la realidad de que no somos los únicos en éste universo y de que tampoco somos los más poderosos, ni poseemos las más alta tecnología.

Por lo que aceptar y reconocer la presencia de otros seres y existencias, nos lleva a replantear muchas cosas que hasta ahora hemos creído, bajo la lupa de nuestros paradigmas.

Tanto los temas del poder, las ideologías y las religiones, dentro del esquema de la historia que hemos enseñado hasta ahora. Tendrán que ser seriamente cuestionadas, desde sus cimientos, al incluir la intervención de estos seres, con sus conocimientos y tecnología.

Así por ejemplo, las enseñanzas de los profetas, de Buda, Lao tze, Quetzalcoatl, Confucio del mismo Jesús y Mahoma ya no se reducen sus inspiraciones a lo divino y celestial —del más allá—, sino a una intervención de estos seres que puedan ser de las Pléyades, de la estrella de Sirio, de otras dimensiones —como la 4 y 5— o de mundos paralelos. Algo que provoca el cuestionar lo que hasta ahora consideramos como Dios, el cielo y en general lo divino. Que, bajo éstas posibles intervenciones extraterrestres, con sus más amplio conocimientos sobre el universo y su historia, modifican, de base, el paradigma actual de las religiones. Lo que genera, mucha resistencia y una tácita acusación de que se tratan de fantasías heréticas, promovidas por el demonio.

Si los poderes celestiales que consideramos, hasta ahora, no provienen de un Dios, como lo ha plasmado la Biblia, sino que más bien es un conocimiento de una gran variedad de seres de luz y existencias cósmicas que de una u otra manera, han intervenido en la tierra desde hace miles, tal vez millones de años. Un saber que nos invoca a reflexionar y a replantearnos, casi todo de lo que hasta ahora hemos venido creyendo de nuestra ‘realidad’ divina y humana. Y junto con ello el concepto de verdad y realidad, tanto como el de justicia y poder
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Nuestra reflexión:

Si son ciertas ya las diversas intervenciones alienígicas en la tierra; mucho de lo que hoy creemos ser, es también debido a su discreta y sutil presencia en los gobiernos o el poder central que ha manejado este planeta a su antojo, por lo que las teorías de conspiración, las novelas y películas de Hollywood no han sido tan descabelladas, como ya lo han hecho recientemente las series como la de Mandalorian, que realiza actualmente Disney acorde a una visión creada por George Lucas.

Viendo las cosas, con un espíritu más abierto y anticipando a que puedan ser ciertas ya las presencias históricas de estos seres en nuestro planeta. Claro que se comprende que se inviten a teólogos y filósofos a tratar éste tema y así podemos preparar y anticiparnos a esta posible situación.

Es el caso del Libro de Urantia, una obra literaria espiritual, teológica y filosófica que habla de Dios, los ángeles, el cielo, el infierno y la vida del hombre en la tierra. Se publicó en 1955 y en el mismo texto se menciona que fue dictado (channeling) a ciertas personas por seres celestiales. Parece, para algunos, una obra de ciencia ficción, mientras que para otros es una fuente de inspiración muy reveladora sobre el conocimiento que se tiene fuera de la tierra, cuyo nombre cósmico es Urantia.

Lee Carroll, relata la presencia de Kryon. Un ser del servicio magnético, que le canalizó toda la información que publicó sobre la alieneación de la tierra y las alteraciones que se tienen que realizar, para preparar a los humanos a una próxima alineación Cósmica.

De igual manera, para algunos es pura fantasía, una vil novela de ciencia ficción. Para otros, una fuente de conocimiento indispensable en nuestros tiempos.

Un ejemplo más es el de las obras de Barbara Marciniack sobre la vida en las Pléyades, donde plasma lo que le han comunicado, unos seres multidimensionales, mientra ella está en trance. Y todo para explicarnos una serie de conocimientos importantes que debemos de considerar los humanos en estos tiempos de transición.

El caso es que estamos iniciando una nueva era y muchos consideran importante estar preparados para este posible encuentro con diversas existencias y no reaccionar con miedo u hostilidad ante su presencia.

De todo esto se desprende la importancia que le están dando en muchas altas esferas tomar con más seriedad y realismo la cercanía con los extraterrestres.

Y tal vez modificar nuestros paradigmas científicos, militares y religiosos frente a una información que está por llegar. O, quizá, todo esto siga en el terreno de la ciencia ficción y las cosas seguirán su propio camino acorde a nuestra historia e inamovible naturaleza y concepción de la verdad y de la realidad.

Veamos qué sigue sobre este asunto. Pronto sabremos más.



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Guillermo Dellamary

Guillermo Dellamary

Dr. Guillermo Dellamary Soy un psicólogo, filósofo, con más de 30 años de experiencia y buscando ayudarte a vivir tu vida de una mejor manera.

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