Impotencia testamentaria
Testar. El enano veía el umbral, pero nada entendía; la serpiente y el águila recitaban cual fieles organillos palabras que jamás alcanzarían a discernir. Zaratustra confirmaba que su vida era póstuma, que aún no eran sus tiempos. Que aquella estrella cuya luz aún no cesaba de llegar a este polvo de polvos en el cosmos, si bien se había extinguido hacía millones de años, continuaba imponiéndose sobre la soberbia de sus temporales pasajeros.
No solo se creían el goznes del universo, le asignaban su medida, perspectiva, razón y lengua.
Pero no les fue suficiente: No satisfechos de su capacidad de creación en acto, quisieron gobernar más allá del cerco de sus tiempos: ordenar al futuro, regir el mañana: testar.
Pobres diablos, les dijo Lennon: “Life is what happens to you while you’re busy making other plans”
Y le cantan y aplauden, pero jamás lo han entendido. ¿Cuándo han entendido? ¿Cuándo entenderán? ¿Por qué habrían de entender?
Si lo suyo es dejar hacer y dejar pasar mientras sueñan.
Ilusos testamentarios, que en el poder de la acción y en el instante, se entregan a la deidad de su impotencia.
¡Enanos!
No pueden con el instante y sueñan de eternidad.
#LFMOpinion
#Impotencia
#Zaratustra
#Lennon
#Enano
#Postumo
#Vida
#Poder