Un día nublado

En Cambalache, Julio Sosa, escribió una afortunada letra del tango que muchos cantamos junto al gran Gardel. Los invito a recordar:

“El mundo fue y será una porquería, ya lo sé
En el quinientos diez y en el dos mil también
Que siempre ha habido chorros, maquiavelos
y estafaos
Contentos y amargados…

Hoy resulta que es lo mismo ser derecho
que traidor
Ignorante, sabio o chorro, pretencioso
estafador
Todo es igual, nada es mejor
¡Lo mismo un burro que un gran profesor...!

Si uno vive en la impostura
Y otro afana en su ambición
Da lo mismo que sea cura, colchonero, rey de
bastos
Caradura o polizón…

Siglo veinte, cambalache, problemático y
febril
El que no llora, no mama; y el que no afana, es
un gil…

Si es lo mismo el que labura
Noche y día como un buey
Que el que vive de las minas, que el que mata,
que el que cura
O está fuera de la ley”.

El cielo está gris y parece otoño, a pesar de que es verano en el hemisferio norte. Muchos estamos turbados o confundidos como Alicia Cienfuegos en este mundo dominado por la aberración, las amenazas y las limitaciones que nos acosan desde La Casa Blanca y Mar-a-Lago y que afectan todas las relaciones entre países y habitantes de nuestro descuidado planeta.

Las promesas siguen sin cumplirse. Puras órdenes ejecutivas que son incertidumbre y aflicción. Que afectan la inversión, la inflación y limitan la capacidad de compra de la mayoría de estadounidenses además de atentar contra el progreso mundial.

La guerra en Gaza no termina. El insolente Netanyahu aumenta los bombardeos contra inocentes en Gaza mientras Trump y su asesina camarilla aplauden a rabiar y pretende invadir para construir una Costa Azul oriental.

Los rusos siguen destruyendo Ucrania y a pesar del apoyo europeo no se ve para cuando se firme la paz.

Los aranceles entre USA y China suben y bajan en su propia guerra comercial. Aparentemente con la ligera victoria asiática que trata a los contrarios con firmeza y golpe a golpe, mostrando lo sabido: a los ‘bullies’ no se les pude negociar sólo con la cabeza fría porque aprovechan toda cortesía o debilidad para pegar.

A México le impuso la administración Trump el cierre de fronteras ganaderas por el gusano barrenador, siendo que ellos son los únicos que controlan la producción de moscas estériles para su contención.

Humillaron a la mediocre gobernadora Marina del Pilar al suspenderle la visa tal vez por los negocios no declarados del esposo y su cuñado. Hoy Baja California es de los estados más violentos del país y particularmente Tijuana es una ciudad muy peligrosa, centro de trata, narcotráfico, fraudes, desapariciones y asesinatos.

Trump insultó a la presidenta con las advertencias de invasión militar contra los violentos cárteles terroristas. La obligaron a militarizar la frontera norte y combatir a narcos, dando por resultados más aprehensiones, destrucción de laboratorios y amplia confiscación de drogas especialmente de fentanilo

Se aceptó la calidad de tercer país involucrado para enviar a Venezuela Cuba y otros países de Centroamérica aviones con sus connacionales expulsados de USA y aceptados en las fronteras mexicanas.

Al mismo tiempo, los trumpistas dan la bienvenida a centenares de afrikáners o sudafricanos blancos con antecedente holandés y alemán disque maltratados por la mayoría negra y en donde Elon Musk, el de Tesla, tiene parientes e influencia.

Se discute en la Cámara de Representantes la posible imposición de gravámenes a las remesas y envíos monetarios al exterior y la negación al subsidio gubernamental por cada nuevo hijo de padres sin papeles oficiales, sin importar que los niños hayan nacido en EUA. Así como la negativa a la ciudadanía estadounidense a niños nacidos en suelo de los EUA de padres sin papeles de residentes o ciudadanos.

El primer viaje oficial al exterior de Trump ha sido a Arabia Saudita donde su yerno e hijos tienen negocios. En la región, las autoridades de Qatar han insistido en regarle un avión para sustituir el Air Force One y el presidente criminal ha aceptado en principio el regalo, porque “sería tonto no aceptarlo” Así piensa en su desnudez indigna de tener que sacar provecho personal a todo.

Mientras los estudiantes y ex estudiantes serán obligados a cubrir los populares créditos sin cuyo apoyo es materialmente imposible pagar las altas colegiaturas y otros gastos académicos. Según especialistas tales créditos son en realidad impagables para la mayoría de acreditados dadas las condiciones actuales de la economía, el mercado laboral y las prioridades de gasto familiar en vivienda y manutención general. El capitalismo en su esplendor. Mientras chinos, indios y otros jóvenes asiáticos estudian en las mejores universidades privadas y ocupan los mejores puestos de trabajo especializado y muy bien pagados.

Jóvenes estudiantes que se manifestaron contra la expulsión de migrantes han sido también expulsados abruptamente a sus países de origen, sin excusa ni pretexto.

El panorama para los mexicanos y otros latinos sin papeles es también grisáceo. Eso de estar semiescondido es estar semidesnudo sin protección contra el frío y la lluvia. Las autoridades les han ofrecido boletos de avión y mil dólares en efectivo a quienes decidan salir voluntariamente de los EUA. Otros siguen trabajado disfrazados. Cualquier multa de tránsito puede ser motivo de expulsión. Se vive de un hilo como las arañas, colgados sin hacer ruido, sin movimientos extremos.

A los grandes profesores ya pocos los contratan por razones de edad o enfermedad. Sólo los previsores, conocedores del sistema ahorraron desde jóvenes para lidear los tiempos de vacas flacas y administraciones republicanas. Los demás, pensamos ilusamente en la generosidad del sistema que cuidaría de los viejos, pero en serio, esto no es Dinamarca.

“Pero que el siglo veinte es un despliegue
De maldad insolente, ya no hay quien lo niegue
Vivimos revolcaos en un merengue
Y en el mismo lodo, hmm, todos manoseaos…

Siglo veinte, cambalache, problemático y
febril
El que no llora, no mama; y el que no afana, es
un gil…”

Descansa en Paz respetado Pepe Mújica, expresidente del Uruguay, revolucionario, humanista y luchador social. Son obvias en este tiempo las diferencias entre gobernantes; unos soeces, mal criados y criminales. Otros, muy pocos, son admirables, honestos, incorruptibles, promotores de la paz y el progreso.


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