No curan ni un catarro
Confieso que caí. Me sorprendo discutiendo con un querido amigo acerca del FONDEN; yo, iluso, le argumento lo que personalmente presencié en el 2005 con Wilma en Quintana Roo, que fue toda una proeza, pero también lo que denuncio en mi libro “El FONDEN electoral” en Yucatán con el Isidore en el 2004, cuyos recursos se guardaron por el gobierno del estado hasta el 2006 para ser utilizados en las elecciones. Pero me sorprendo porque volví a caer, estamos discutiendo el pasado de un confiscado FONDEN para no discutir el hoy y aquí de un México que no cura ni un catarro.
#LFMOpinion
#Epifanias
#FONDEN