Execrado
Noroña dice que lo timaron, que lo citaron en el Partidos del Trabajo (PT) para abuchearlo y, por supuesto, que es injusto e inmerecido. Lo que no osa hacer es preguntarse por qué. Por supuesto que lo timaron y que todo fue perfectamente maquinado y operado, pero ¿por qué a su candidato a corcholata, al que se supone apoyaron con todo para llevarlo a la candidatura presidencial hace un año, hoy lo denostan y odian con tanto ahínco y pasión? Hoy se hace el ofendido y la víctima, pero la pregunta sigue sin contestar: ¿qué hay en su haber para que le paguen de esa manera? ¿O será, tal vez, un cobro? Por lo pronto sus sueños mojados por la presidencia de la República pueden ir tachando al PT y a sus militantes de cualquier apoyo y simpatía. Por otro lado, Noroña habla de Morena como su origen y casa, pero entonces ¿qué hizo y para qué en el PT tantos años que, por lo visto, de poco le sirvieron? ¿O es que cayó allí en uno de sus tantos y seguidos resbalones? Sólo él lo sabrá. Se vale sobar Noroña e irse acostumbrando sería una oportuna recomendación.
#LFMOpinion
#Epifanias
#Norona
#PT