Intercampañas, el chipote

Nuestra partidocracia es víctima de sus bodrios de una reforma electoral construida a base de chantajes y mordidas.

Tres líderes de partido se sentaron a jugar a la política con la endeble democracia en México.

Borrachos de poder hicieron de la ya de suyo compleja y confusa legislación electoral un batidillo, condenaron a las instituciones electorales al caos y desprestigio, e hicieron del proceso electoral la construcción de un poder sin legitimidad.

Lo importante era cambiar todo sin cambiar nada. Cambiar nombres, inventar términos, hacer actos de prestidigitación, pero que las cosas siguieran igual.

Se ratificaron las precampañas con candidatos únicos, un contrasentido en sus términos. Si solamente hay una opción, qué caso tiene que se corra una campaña en solitario y se gaste dinero si por ir solo ella ya se ganó.

El cambio más importante fue levantar la prohibición a precandidatos únicos de tener acceso a tiempos de radio y televisión, como se establecía en 2012, lo que orilló a Acción Nacional a la pantomima de una contienda entra Vázquez Mota, Creel y Cordero.

Y en lugar de cerrar la puerta a la simulación, la abrieron de par en par para que todos pudieran ir a precampañas con tiempos de radio y televisión con precandidatos únicos.

El problema, sin embargo, es que la simulación de precampañas los condena a un espacio de tiempo para procesar posibles impugnaciones. ¿De quién, preguntará usted, si fueron diseñadas para candidatos únicos? No importa, dijeron ya montados en la simulación, llamémosle intercampañas, donde no se podrá hacer campaña pero sí se tendrá derecho a millones de spots en radio y televisión, más de seis. Los precandidatos únicos en vías de unción no podrán hacer campaña ni llamar al voto, pero estarán abiertamente simulando eventos y spots que en el fondo, como las precampañas, son campañas en su esencia.

Es así como llegamos a esta sinrazón, precampañas que no son, intercampañas que tampoco son. Todo por aparentar cambios en una legislación que hace aguas desde hace más de dos décadas.

Las intercampañas son uno de tantos chipotes de una legislación hija de los caprichos de aprendices de brujos metidos a políticos.

#LFMOpinión
#Partidocracia
#Simulación
#Precampañas
#ReformaPolítica
#PactoPorMéxico
#Intercampañas