SUSTENTABILIDAD INDIVIDUAL

LA CIVILIDAD EN LA SUSTENTABILIDAD INDIVIDUAL. Parte II.

LA CIVILIDAD EN LA SUSTENTABILIDAD INDIVIDUAL. Parte II.
¿A qué grado será el deterioro de las sociedades modernas?

¿En dónde radica la mayor fuerza que le da civilidad a una sociedad?

Las grandes civilizaciones han tenido un común denominador que les ha permitido mejorar, avanzar, consolidarse, evolucionar: sus adultos mayores. Porque los procuran y los escuchan, los consultan y obedecen, porque les conceden un legítimo reconocimiento a su sabiduría y experiencia, porque no queda en duda su nivel de compromiso y amor a la tierra que los vio nacer y que han dejado como legado. A ellos, los adultos, y a los otros, los sujetos en consecuencia. Las instancias creadas en Consejos de Ancianos, inclusive, llegaron a ejercer el poder o a tener una participación determinante en la toma de decisiones, a erigirse como el liderazgo natural de los pueblos y no solo influencia.

- ¿Y a qué grado será el deterioro de las sociedades modernas?.. que a nuestros adultos mayores los hemos marginado, arrumbado, vergonzosamente los hemos arrinconado y traicionado por no continuar esa lucha que emprendieron por los ideales del interés superior, esos ideales que formaron a la Patria. -

Y hablando de la Patria, que la falta de respeto hacia ella se muestra de múltiples formas, de hecho, hasta en el modo como algunos se refieren a ella. Solo basta poner atención a los discursos de ciertos políticos, empresarios, periodistas, académicos y hasta intelectuales, que utilizan el vocablo "este país". Como si les fuese ajena la Patria. Es claro que no la sienten suya, que la ven ajena, quizá como un botín, quizá como un ente endeble o transitorio. Como una cosa. Y todavía con demagogia dicen frases tales como "trabajamos por el bien de este país", "solo nos importa este país", "debemos cerrar filas por este país." Así que pregunto:

- ¿Cuándo al referirse a su madre, a su hija, a sus hijos, les llaman "esta madre", "esta hija", "estos hijos"? -
- Nunca. -

Pareciera un término acuñado por algunos tecnócratas, derivado de las traducciones literales, mal hechas, que con frecuencia hacen del inglés al español. Y que pudo ser tomado de una expresión de los funcionarios de alto rango del Tesoro estadunidense, a quienes admiran tanto, quienes en efecto, se refieren a su país como "this country". Pero ellos, todos, son inmigrantes, y en todo caso, su Patria es el dinero.

Sin duda que la Patria, no la sienten suya. Y créanme que, mayor pobreza, no puede existir.

Lo más extraordinario de lo antes expuesto, es que nuestros adultos mayores son los mejores defensores de la Patria, y de alguna forma, los precursores del bienestar social. Los más confiables. Porque su vida misma es el manto protector de la vida nacional. Adultos mayores y Patria son los únicos baluartes en quienes podemos fincar un futuro promisorio. Y más en estas épocas a las que llamamos "modernidad."

El conocimiento, pensamiento y experiencia de nuestros adultos mayores son a tal grado valiosos, que debiesen ser integrados y aprovechados en los procesos de "toma de decisiones por medios públicos": en la política (definición de Karl Deutsch). En una sociedad que se jacte de inteligente y de avanzada, a los adultos mayores se les deben dar espacios en instancias ciudadanas para que coadyuven a nutrir el criterio de los gobernantes, precisamente antes de que tomen decisiones. Para evitar en la medida de lo posible las decisiones equivocadas. Y de ribete para cubrir con cierta legitimidad tales decisiones. Porque hoy en día, hasta las investiduras constitucionales se han hecho ilegítimas – de facto cuando menos.- Pero todo es al revés, todo es irracional.

Inspirados en esta premisa y en el hecho de que en México tenemos un acervo cultural excepcional en términos de desarrollo humano – también desaprovechado – es que en el año 2004, a través de mi Fundación México en la Cima del Mundo, A.C., propuse la creación del Consejo Consultivo de la Nación, como uno de los cinco pilares elementales de un Plan Maestro de Reingeniería Política para nuestro país, que busca la transformación democrática y el empoderamiento ciudadano responsable. Así, el consejo sería un órgano no gubernamental conformado por personas con experiencia probada, deseosos de compartir sus vivencias en casos y proyectos relacionados con la "res publica" (cosa pública). A manera de un grupo asesor calificado que emita recomendaciones en temas diversos y sustantivos, con la finalidad de elevar las probabilidades de éxito de iniciativas y medidas gubernamentales, al mismo tiempo que le otorgue mayor legitimidad a las decisiones complejas de gobierno: para darle certidumbre a la gestión y consecuente seguimiento.

Establecimos entonces y lo seguimos sosteniendo, que el Consejo Consultivo de la Nación debiese ser una especie de Consejo de Ancianos, pero nutrido con la participación, energía y dinamismo de todas las generaciones en vida, representadas en la figura de mujeres y hombres de México, que han sido reconocidos y a su vez galardonados, por alguna contribución al acervo cultural de nuestro país: como los Premios Nacionales de Ciencias y Artes, de Investigación, de Tecnología, de Administración Pública, de Periodismo, de la Juventud, del Deporte, de Calidad, de Exportación, de Seguridad e Higiene y muchos más, así como por ciudadanos destacados y deseosos de aportar su experiencia y conocimiento de manera altruista.

Solo así, con estrategia, madurez, respeto, orden y civilidad, lograremos salir avante de la situación de desmejora continua en la que se encuentra nuestra sociedad entera.

Y a propósito, el tiempo se nos escapa de las manos.

"La democracia es el destino de la humanidad; la libertad su brazo indestructible."

- Benito Juárez -




#LFMOpinion
#Patria
#Civilidad
#Marginacion
#Tiempo

Hugo Rodriguez B.

Hugo Rodriguez B.

Nací en Tlalpan, Distrito Federal y cursé tres licenciaturas: en Comunicación, en Derecho y en Economía. La Maestría en Administración y el Doctorado en Ciencias. Adicional a mis actividades académicas, destaqué en los ámbitos deportivo y profesional. Deportivamente, ascendí en dos ocasiones al Monte Everest y soy el único ser humano que sobrevivió una noche en las inmediaciones de la cumbre sin oxígeno, tienda de campaña ni sleeping bag, situación de sobrevivencia que me fortaleció en disciplina y determinación para lograr todo lo que me he propuesto en la vida. Adicionalmente crucé a nado en dos ocasiones el Canal de la Mancha. Además tengo el récord mundial de larga distancia en nado de mariposa de 70 kilómetros de Cozumel a Cancún. Fui galardonado con el Premio Nacional del Deporte en 1986 y el Deportista del Siglo en el año 2000 (con 55 deportistas más de diversas disciplinas). He sido considerado como uno de los deportistas de extremo y alta resistencia más destacados del mundo.

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